Un devastador terremoto de 6,8 en la escala de Richter sacudió la nación del norte de África el viernes por la noche y mató al menos a 2.886 personas y heridos 2.562. El terremoto sacudió la cordillera del Alto Atlas y arrasó los pequeños pueblos y el centro de Marrakech. Las operaciones de rescate continúan, ya que hay muchas personas aplastadas bajo los restos de Al Haouz, donde el terremoto fue más devastador. Cada minuto cuenta en la búsqueda de supervivientes, pero el gobierno marroquí es selectivo con qué países acepta. Francia quedó fuera de la decisión de Marruecos de aceptar la ayuda del Reino Unido, España, Qatar y Emiratos Árabes Unidos. Cuando el número de muertos sigue aumentando y la ciudad queda reducida a escombros, ¿por qué Marruecos rechaza la ayuda francesa en casos de desastre? Al analizar las recientes tensiones entre Marruecos y Francia, resulta evidente que la tensa relación entre los dos países es el issue que contribuye al rechazo de la ayuda durante este horrible momento de necesidad. Se supone que las grandes disaster humanitarias como ésta son una oportunidad para cerrar la brecha entre las naciones, pero también pueden ser una oportunidad que se pasa por alto.
Contexto
La controversia entre Marruecos y Francia tiene sus raíces en factores históricos, políticos y diplomáticos. Originalmente, Marruecos period un Protectorado francés de 1912 a 1956, y luego, en 1956, el país obtuvo su independencia. Por lo tanto, existe una importante diáspora marroquí en Francia, razón por la cual el gobierno prometió 5 millones de euros para ayudar con ayuda. Además, cuatro residentes franceses murió en el terremoto. Sin embargo, un tema de discordia entre ambos es el reclamo soberano sobre el Sáhara Occidental. Marruecos reconoce el Sáhara Occidental como parte de su país, pero Francia se niega a reconocerlo. En 2021, Francia lanzó una ofensiva contra los inmigrantes de Marruecos, Argelia y Túnez, amenazando para cortarles las visas a menos que aceptaran aceptar inmigrantes de regreso. Las naciones antes mencionadas lo tomaron como una señal de vergüenza. Estas controversias, agravadas por la decisión del gobierno de rechazar la ayuda francesa, son indicativas de las gélidas relaciones diplomáticas entre el presidente Emmanuel Macron y el rey Mohammed VI. A pesar de que el rey se encontraba en Francia cuando se produjo el terremoto, no se hizo ningún intento de resolver la tensión.
Significado
La renuencia de Marruecos a aceptar ayuda está desconcertando a los grupos de ayuda globales. El tiempo es el recurso más preciado cuando se trata de ayuda en casos de desastre. Al rechazar a los franceses, el gobierno marroquí está quitando un tiempo precioso a los supervivientes de este devastador terremoto. Sobre todo porque Francia es conocida por ser un experto en ayuda en casos de desastre, tienen los recursos para movilizar operaciones de rescate coordinadas sobre el terreno. A raíz de esta horrible disaster humanitaria, la atención debería centrarse en ayudar a los que sufren, no en equilibrar las relaciones internacionales adversas. Esta decisión tomada por el gobierno marroquí en realidad está perjudicando a su pueblo. Esa ayuda podría utilizarse para llegar a partes del pueblo que no son accesibles debido a la gran destrucción. El aumento de los retrasos ha provocado que las familias desenterrandose de los escombros. Además, el gobierno ha guardado un dudoso silencio sobre la gravedad de la disaster. En lugar de hacer un amplio llamamiento a la ayuda, Marruecos está limitando la ayuda exterior. Para que este sea el terremoto más fuerte que haya azotado al país en más de un siglo, el gobierno está dispuesto a restar importancia a la gravedad de la situación y a proporcionar recursos inadecuados. Por lo tanto, la respuesta a la catástrofe promueve la noción de que la administración es indiferente a la difícil situación de la gente en los empobrecidos pueblos de montaña sacudidos por el terremoto, prefiriendo más bien a los habitantes metropolitanos ricos y a los turistas extranjeros. Con vidas perdidas y hogares destruidos, ahora no es el momento para hacer política mezquina, sino más bien una oportunidad para unirnos en tiempos de necesidad.
Alivio de las inundaciones en Libia
El caso de las inundaciones en Libia es otro caso en el que los esfuerzos de ayuda se ven obstaculizados por complicaciones políticas en el norte de África. Más que 5.300 personas fueron asesinadas y 10.000 están desaparecidos en Libia cuando una tormenta provocó la rotura de ríos y represas. tormenta daniel causó estragos en la ciudad portuaria de Derna, en el este de Libia, prácticamente arrasándola. El terremoto de Marruecos y el de Libia han provocado 8.000 muertos y muchos más heridos o desaparecidos. Ambas comunidades devastadas han esperado durante días ayuda, frecuentemente desenterrando y enterrando a sus muertos con poca o ninguna ayuda de sus gobiernos. Algunas de las demoras pueden atribuirse a infraestructura dañada; Sin embargo, el principal impedimento es la política. Parece que el período inmediatamente posterior a un desastre pure es un momento para dejar de lado las diferencias políticas. Los retrasos en la recepción de ayuda en Marruecos y Libia, una nación percibida como la base de la estabilidad en la región y la otra desgarrada por el conflicto y gobernada por gobiernos rivales, muestran lo difícil que es separar las preocupaciones políticas de la ayuda humanitaria. A pesar de las marcadas diferencias entre los dos, ambos se encuentran en la misma situación. Ambos gobiernos deben aceptar la responsabilidad y hacer un esfuerzo coordinado para brindar ayuda a los ciudadanos de sus respectivos países.